Es curioso. En ocasiones un olor, un sabor te evoca un recuerdo. En mi caso, hoy es al contrario: un recuerdo despierta mi gusto y mi olfato.
Hoy el aire, el cielo, me huelen a "panellets"... y así será siempre, cada 31 de octubre de mi vida.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario